Ciudad de México.- La corrupción en los altos mandos del gobierno parecen que están a la orden del día, pues el Gobernador de Coahuila, Rubén Moreira Valdez, exoneró desde mayo de 2015 a su hermano Humberto, acusado de presunto fraude y operaciones con recursos de procedencia ilícita.
El ex priista -que raro- Humberto Moreira, uno de los “10 mexicanos más corruptos”, según la revista Forbes, es investigado desde enero de 2016 por las autoridades de Estados Unidos por sus presuntos vínculos con el crimen organizado.
A pesar de las pruebas y testimonios en su contra, gracias a la declaración de su hermano, Humberto fue liberado en España.
Miembros de Los Zetas declararon en Estados Unidos que durante su gestión, Humberto Moreira habría recibido millones de pesos por dejar operar a esa organización, misma que, según los testimonios, habría financiado la campaña del ahora Gobernador Rubén Moreira.
Por si fuera poco, la exhaustiva investigación que supuestamente se le realizó, duró sólo 5 meses. La investigación por parte de las autoridades estatales fue iniciada a finales de 2014 a partir de la información difundida en notas periodísticas sobre la compra de medios de comunicación con recursos del erario. El 16 de abril de ese año, Moreira Valdés compareció y negó las acusaciones en su contra.
En enero de 2016 fue liberado, reafirmando una vez más la inminente corrupción dentro de la política mexicana. ¿Acaso no hay ética ni sentido de justicia de nadie?