Debido a que desde el pasado 15 de junio tomaron el Congreso de Baja California, elementos de la Policía Estatal Preventiva (PEP) desalojaron a decenas de integrantes de cinco organizaciones civiles.
Los inconformes protestaron porque el actual gobierno de Francisco Vega de Lamadrid no ha cumplido sus demandas y por mostrar su inconformidad a la ampliación del periodo de gobierno de Jaime Bonilla Valdez, de dos a cinco años.
Entre los organizadores de la toma del Congreso se encontraban activistas de agrupaciones que ya han sido señalados en redes sociales por asumir causas a nombre de todos los habitantes del estado.
Personajes como Rigoberto Campos, “El Rigo”; Filiberto Sánchez Gurrola, “Don Fili”; y Alma Araceli Piña, “La Piña”, han sido acusados de colgarse de coyunturas favorables a los intereses de algunas minorías y que, en algunos casos, terminan por afectar hasta la inversión en la entidad.
El pasado lunes 29 de julio, diputadas de Morena y representantes de estos colectivos se agruparon para llegar a un acuerdo. Tras un diálogo, que duró varias horas, se acordó reunirse el martes para cumplir con lo acordado pero los líderes impidieron que se llegara a un acuerdo.
“Nosotros desde el principio dijimos que ya no sesionaría esta Legislatura y así lo vamos a cumplir hasta la medianoche del 1 de agosto”, advirtió Sánchez Gurrola.
Los legisladores no sesionaban desde el pasado 23 de julio, debido al bloqueo que este grupo de activistas realizó al Congreso de Baja California.