Ciudad de México.- En diciembre pasado, la constructora brasileña Odebrecht confesó ante el Departamento de Justicia de Estados Unidos que pagó 10.5 millones de dólares en sobornos a funcionarios mexicanos entre 2010 y 2014, años en los que evidentemente estaba Felipe Calderón en el poder.
El día de ayer Andrés Manuel López Obrador acusó que, como Presidente de la República, Felipe Calderón fue cómplice en los sobornos que pagó la empresa a funcionarios del Gobierno federal para conseguir contratos.
La eterna pelea entre ambos no es cosa nueva, y muchas veces ya no sabemos si creerles o no, sin embargo, entre dimes y diretes es cierto que esta empresa no pudo haber pagado tantos sobornos sin que Calderón se enterara, después de todo, estaba a la cabeza del país ¿O no?
“Era tan grande la complicidad de estos empresarios brasileños con los funcionarios del Gobierno de México, que hasta una reunión del consejo de Odebrecht se llevó a cabo en Los Pinos. Ahí se encontraba el representante de Odebrecht, junto a Felipe Calderón” menciona Andrés Manuel.
De acuerdo con el dirigente de Morena, Odebrecht quiso construir, durante el sexenio de Calderón, una presa hidroeléctrica para venderle la energía a la Comisión Federal de Electricidad, en esa ocasión, los pobladores se opusieron a la privatización, por ello no se concluyó el trato.
Hasta el momento todo queda en palabras, pero debemos recordar que las investigaciones contra los fraudes de esta empresa siguen en pie y tarde o temprano saldrán a la luz cientos de nombres que tal vez no nos sorprendan del todo.
